Seguramente el discurso de la vicedirectora Silvina Panarese no fue el "políticamente correcto", quizás bajar a Manuel Belgrano del bronce y rescatar su legado, el cual no se simplifica en la creación del pabellón nacional, como la historia "mitrista", historia de los poderosos, nos enseñó en la escuela, no fue lo adecuado.

Honrar la figura de un prócer, es reivindicar los valores por los que luchó ese prócer. Un Belgrano que defendió la educación pública argentina antes que Faustino Sarmiento, quién polemizó en la defensa de los intereses de los que no tenían voz, criollos y pueblos originarios, y que soñó un país industrializado que alentará el consumo interno porque agricultura y comercio eran insuficientes.

Silvina Panarese sólo cometió el pecado de reflexionar sobre esos principios a la luz de nuestros días, principios que al momento integran el ideario de Belgrano y de muchas fuerzas políticas que no necesariamente son peronistas o kirchneristas.

Lamentablemente ganó la intolerancia y la indignación por parte de algunos presentes que no escucharon al orador.

Ayer sin ir más lejos fue la máxima autoridad política del país, el presidente Mauricio Macri, quien hizo gritar a los niños y niñas presentes su slogan de campaña político-partidaria utilizada años antes en la campaña de Barack Obama. "¡Sí se puede, sí se puede!" era la consigna entonada. No vi reflejada tal indignación en los medios locales de comunicación.

Evidentemente el problema es netamente político, densamente político; el discurso y la reacción al discurso.

Sólo espero que los aires de revanchismo que soplan por estos días en la Argentina no se cobren una víctima más.

Al momento, el inspector Jefe Distrital de Inspectores, Luis Decastelli, quién llegará a su cargo en tiempos K, se despegó del discurso de la docente.

Ojalá todos los actos escolares fueran espacios de reflexión política, alejados del protocolo estéril e inútil.

Ojalá construyamos cada día más ciudadanas y ciudadanos críticos, que puedan ser políticamente incorrectos, como Belgrano, como Güemes o San Martín que se atrevieron a soñar una Patria libre e independiente del status quo español.

(*) profesor, referente del Movimiento Evita y ex concejal del FpV.