Panorama Político de Necochea
Evadido de la realidad

Las puertitas del Sr. López: "Hay gente que me pide que vuelva"

Al igual que su homónimo, Facundo López utiliza como escapatoria su imaginación cuando la realidad le pesa. El personaje de la historieta se evade viajando a un mundo alterno e interior, el ex intendente, igual. (Dibujo: NOVA)

Como el personaje de "Las puertitas del Señor López", la historieta nacida en plena dictadura militar, el ex intendente Facundo López, se evade de la realidad.

Al igual que su homónimo López utiliza como escapatoria su imaginación cuando la realidad le pesa. El personaje de la historieta se evade viajando a un mundo alterno e interior, al que accede simplemente por la puerta de cualquier baño; allí el López de ficción encuentra sus más grandes placeres, mientras que el ex intendente plasma su mundo de fantasía en declaraciones mediáticas.

No hace falta hacer mucha memoria para tener presente el paso del massista Facundo López por la municipalidad de Necochea: trabajadores que cobraban los sueldos hasta en 7 cuotas, el sistema de salud pública destrozado, sin insumos y su personal en paro y movilización permanente, cuentas corrientes cortadas con todos los proveedores por falta de pago, la mayor deuda pública en la historia de Necochea, deuda multimillonaria con la provincia por obras cobradas sin ejecución (lo que además constituye un delito), deuda con el banco provincia por cheques sin fondo y descubiertos y los actos de corrupción más escandalosos de las últimas décadas.

Sin embargo, sin ponerse colorado, el ex jefe comunal devenido en funcionario nacional gracias a las bondades de la política, afirma que la gente le pide que vuelva e incluso lo invitan a cenar.

Cada vez que abre la boca Facundo López genera controversia y tanto vecinos como trabajadores municipales se acuerdan en malos términos de su árbol genealógico completo. En una entrevista realizada por un medio local, relativizó el hecho de pagar los sueldos de los trabajadores en tiempo y forma: "lo felicito porque está al día con los sueldos, pero tiene muchos problemas con el sistema sanitario". Ningún piropo empieza con pero.

De más está decir que el Sindicato de Trabajadores Municipales le saltó a la yugular y le aplicó un "chito calladito", afirmando que el ex intendente "sigue sin entender nada, porque si hay algo que no podés relativizar es estar al día con los trabajadores".

Cuando Facundo López dejó a municipalidad en el 2019 no solo lo aplastaron en las urnas (Arturo Rojas sacó el doble de votos) sino que se fue abucheado por los trabajadores, algo nunca visto en nuestra ciudad, no obstante no esconde las ganas de seguir rodando en la política local "estamos trabajando para el 2023 y vamos a presentar ante el electorado un muy buen candidato o candidata" dijo y desestimó una eventual candidatura de su hermana Jimena López que ya se había anotado y anunciado sus ganas de ser intendenta de Necochea.

Y como si no le alcanza con meter la cuchara en su propio espacio político (que en cada elección achica su caudal electoral), se metió en la interna de Juntos ungiendo a Martín Migueles, el que se fue de a presidencia de la Usina Popular Cooperativa dejando atrás una deuda que por poco lleva a la quiebra a la institución fruto del despilfarro y sus malas decisiones): "es un buen candidato" señaló.

Tras una serie de declaraciones sin ton ni son que abarcaron justificaciones a los desastres de su gestión, las deudas que dejó pendientes y chicanas a la actual administración municipal, Facundo López aprovechó el espacio que le dio el autoproclamado "diario de la ciudad" para llevar agua para su molino a partir de la alianza relanzada entre Cristina Fernández y Sergio Massa y así acomodarse donde mejor le pegue el sol, al tiempo que recuerda que es el soldado número uno del actual ministro de Economía "yo nunca me moví de este espacio" .

Aunque el ex intendente dejó entrever que se ha puesto en marcha un "operativo clamor" para que vuelva a ocupar el sillón de Murga (“hoy la gente me saluda, me invitan a tomar café o cenar”), el vecino de Necochea que recuerda su gestión sabe que del ridículo no se vuelve, y de la condena social tampoco.

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