Dos delincuentes irrumpieron en una veterinaria, redujeron al hijo del dueño y a un empleado, se alzaron con unos 2.500 pesos, celulares y una moto, pero en forma inexplicable, uno de los ladrones se dio vuelta antes de salir por la puerta del comercio y baleó a una de las víctimas, informaron fuentes policiales.
Todo ocurrió el viernes pasado al mediodía cuando llegaron dos desconocidos en una moto y encañonaron a Ezequiel Maas y a Guillermo Gagio en la veterinaria de 38 entre 132 y 133. Enseguida se mostraron violentos y lograron un suculento botín.
Luego dispararon contra Ezequiel y la bala impactó en el hombro derecho del joven.
Mirta Espósito, de 50 años, madre del comerciante herido, contó que “Ezequiel le dio todo lo que tenía y se quedó sentado como los delincuentes le ordenaron. No hubo forcejeo ni resistencia. Ni siquiera un insulto, pero igual casi lo matan”, dijo indignada.
Los asaltantes se fueron en dos motos, en la que habían llegado y en la Honda Twister de Ezequiel.
Gagio pidió ayuda de inmediato y llegaron enseguida policías de la subcomisaría La Unión. La víctima lesionada estaba consciente pero la demora de la llegada de la ambulancia hizo que Mirta, la madre, lo cargara en su auto para llevarlo al Hospital Italiano.
En el nosocomio atendieron a Ezequiel y los médicos se dieron cuenta que la bala no había dañado órganos vitales y que no era necesaria operación alguna.
La Honda Twister fue hallada en 37 y 135, ya que tenía el sensor de distancia activado y el motor se detuvo.
Interviene la UFI Nº 9 de Autores Ignorados, a cargo del fiscal Fernando Cartasegna.
