El 20 de marzo, por disposición del Gobierno nacional, todo el territorio argentino entró en aislamiento total obligatorio para evitar el contagio y propagación del COVID-19.
Uno de los objetivos que tanto la gestión nacional como los gobernadores plantearon como primordiales, fue preparar el sistema de salud para el punto máximo de contagios, que se esperaba en un primer momento para el mes de mayo y luego para junio. Con más de 2 mil casos diarios, las autoridades anuncian que lo peor está por venir.
Previendo el colapso del sistema de salud en el área metropolitana, donde está el foco del contagio, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, anunció la posibilidad de trasladar pacientes al interior de la provincia. Ciudades como Mar del Plata, Balcarce, Tandil y Lobería ya dieron su rotunda negativa a esa posibilidad.
Este abordaje de emergencia propuesto por el gobernador tiene el soporte de un convenio entre el Ejecutivo y los municipios. Buenos Aires prevé 2 mil pesos por paciente con coronavirus destinados a centros extrahospitalarios. El Concejo Deliberante de Necochea tendrá en sus manos la aceptación o rechazo de este convenio.
Un dato que va a pesar en los concejales a la hora de plantear su postura, más allá de cuestiones humanitarias, es que además del aporte millonario de la Provincia para la reconstrucción del sistema de salud local, Necochea tiene un hospital que depende directamente del Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires, el Hospital Subzonal Domingo José Taraborelli, del que el Gobierno provincial podría hacer uso sin necesidad de homologar convenios.
La Provincia dispone de 3.557 camas de terapia intensiva con respiradores, monitores multiparamétricos y todo lo necesario para la unidad completa de TI. Tiene la mitad ocupada. El número que espanta a las autoridades y encendería todas las señales de alarma es el 80 por ciento de ocupación.
Ante la posibilidad de recibir pacientes de otros distritos, la gran preocupación por estas horas apunta al cuidado del personal del área de salud, si se tiene en cuenta que ante un primer brote, con pacientes asintomáticos -de los que solo 3 requirieron internación para monitoreo- un trabajador del área de salud dio positivo a coronavirus.
