Para muchos adultos mayores, el simple hecho de sacar turno con su médico de cabecera, hacer autorizar una receta, tratar de conseguir descuento para algún medicamento que la obra social dejó de incluir en su plantilla, se transforma en una amansadora inhumana donde no se tiene en cuenta la salud precaria o su edad.

Poco más de 2600 jubilados se verán perjudicados por el ajuste que impulsa el cierre de PAMI en Quequén, además de los gastos y las dificultades que ocasiona movilizarse hasta las oficinas centrales, se suman las eternas colas y el escaso personal capacitado que demoran los trámites.

El precandidato a intendente por Cambiemos, Gonzalo Diez, expresaba en apoyo al acuerdo con el FMI, que "en la economía todo tiene un costo". Pero ese costo no pueden ser nuestros abuelos y abuelas, no pueden ser los trabajadores y trabajadoras pasivos de nuestro país.

“Este cierre, representa de manera clara, las políticas de ajuste que viene desarrollando el gobierno nacional en áreas sensibles del Estado, y eso se traduce en: menor calidad de atención, menos recursos y mayor abandono de nuestros abuelos y abuelas”, expresó Luciano Lescano, concejal mandato cumplido (2011-2015), referente del Movimiento Evita Necochea Quequén.

Y agregó: “Quiero expresar mi rechazo a esta medida y el reclamo, al Sr Intendente, Facundo López y a los diputados provinciales de Cambiemos, Rago y Dominguez Yelpo para que realicen las gestiones necesarias que permitan que PAMI Quequén siga funcionando”.

También han sido notificados del cierre de dependencias bajo su órbita los trabajadores de Rosario, Lanús, Mar del Plata, Entre Ríos, Neuquén, Chubut, Catamarca, La Rioja, San Justo y Chivilcoy.