Luego del incendio que destruyó las instalaciones del edificio de la vieja estación de trenes de Quequén, llegaron los carroñeros que están robando los restos de mobiliario y artículos de valor histórico.
En octubre de 2010 los edificios del ferrocarril del distrito de Necochea fueron declarados Patrimonio Histórico de la provincia de Buenos Aires, aún así el abandono y la desidia terminaron con uno de los emblemas de un pasado de pujanza y crecimiento.
A pesar de que el incendio, aparentemente intencional, produjo importantes daños en el edificio; algunos muebles, cartelería y artículos como teléfonos antiguos, bancos, incluso puertas y ventanas se salvaron de las llamas pero vecinos inescrupulosos desmantelaron los restos de la estación y arrasaron con todo.
A la tristeza y conmoción de las primeras horas, la comunidad se agrupó para restaurar la vieja estación. A los artistas y vecinos autoconvocados se sumó el diputado Roberto Rago que inició los trámites para obtener un subsidio para la reparación y puesta en valor del edificio.
