La meritocracia PRO lo llevó a la Cámara de Diputados bonaerense gracias a la billetera de papá y el apellido de mamá. Es hijo del secretario general adjunto de la UTA, Daniel Domínguez, y nieto de Hugo Yelpo, uno de los intendentes más queridos y recordados de Necochea.

“En la cancha se ven los pingos”, dicen, y aunque se arroga la conducción del PRO Necochea, todavía no aparece un lineamiento de trabajo territorial -y mucho menos seccional- que lo consoliden políticamente.

Algunos hasta llegan a decir que la ha usurpado, ya que cuando el aterrizó en el círculo macrista siendo concejal del Partido Fe, la gente que lo recibió y acompañó durante la campaña electoral era un grupo consolidado con años de militancia en el distrito, que llegó incluso a “soplarle la nuca” a candidato de Venegas e instaló dos concejales.

El armado de la conducción provincial del PRO así lo demuestra. Con María Eugenia Vidal, Jorge Macri y Esteban Bullrich a la cabeza, representando a la quinta sección electoral aparecen el intendente de Pinamar, el mediático Martín Yeza; Camilo Etchevarren, intendente de Dolores; y la marplatense María Florencia Ranellucci.

Tampoco logró colarse en la Asamblea Provincial. Los cargos seccionales correspondientes fueron ocupados por Sandra Ferrandi, María Celia Fino y Ramón Canosa.