Las complejas condiciones de los calabozos de las comisarias necochenses, como el hacinamiento y la precariedad de las instalaciones obligan en muchos casos a otorgar beneficios extraordinarios a los detenidos por diferentes causas.

Por ejemplo, la Comisaría Primera puede llegar a alojar a once detenidos cuando su capacidad es para ocho personas. Lo mismo sucede en la seccional Segunda, de Quequén.

En cuanto a la Tercera, la dependencia tiene la particularidad de recibir a los individuos con salidas laborales o que cumplen con obligaciones escolares, y sólo permanecen en la comisaría para pernoctar. En este caso se les ha otorgado el beneficio del arresto domiciliario ya que por las malas condiciones se procedió a la clausura de los calabozos.

Por otro lado, la DDI local también aporta sus celdas construidas no hace mucho tiempo y en este lugar hay detenidos, al tiempo que la capacidad es para cuatro.

En la Subcomisaría de Juan N. Fernández; Estación de Policía Comunal de Lobería y la Estación de Policía Comunal de San Cayetano también hay presos por diferentes causas.

El sistema carcelario de Necochea es insostenible y nefasto al punto de ser calificados como "taperas infames” a los calabozos de la Comisaría de la playa, aunque la situación no se modifica demasiado en relación a las demás dependencias, es decir las Comisarías Primera y Segunda.

El sistema actual muestra un fracaso estrepitoso. Casi el 50 por ciento de las personas que salen de una cárcel bonaerense vuelven a ingresar.

La reiterada e incumplida promesa de la alcaidía

Las condiciones infrahumanas en las que se hallan los individuos privados de la libertad reabren nuevamente la polémica por la necesidad de contar con una alcaidía para albergar a quienes tienen causas penales en pleno proceso en el Departamento Judicial de Necochea.

Desde el 2007 cuando el entonces intendente Daniel Molina vivía su luna de miel con el kirchnerismo, llegó el primer aluvión de promesas por parte del gobierno nacional, Necochea espera la construcción de una alcaidía que brinde un espacio de detención a la creciente población carcelaria en nuestro distrito.

Si bien fuentes cercanas al ministro de Justicia informaron a NOVA que el Ejecutivo provincial envió en los últimos días al intendente municipal un proyecto para la construcción de una alcaidía para alojar 160 reclusos. Facundo López aún no ha hecho pública la novedad.